sábado, 13 de agosto de 2011

La irresponsabilidad

Para mí, una persona irresponsable no es aquélla que comete irresponsabilidades. Todos somos humanos y cometemos fallos que, en ocasiones, pueden ser llamados "irresponsabilidades"; es decir, decisiones realizadas sin la debida meditación o resultantes de una falta de previsión. Ahora bien, en mi opinión, irresponsable es aquel que, después de realizada y conocida la acción irresponsable, no pone nada de su parte para eliminar, o al menos paliar, los efectos negativos que ésta haya ocasionado y, aún más, la oculta no sólo a ojos de los demás, sino a sus propios ojos, pensando, con la estrategia del avestruz, que esa acción no tendrá consecuencias.


Por otra parte, hay otro nivel de irresponsabilidad de mayor grado que se produce cuando, tras el caso anterior en el que el irresponsable actuaba como si nada hubiera pasado, éste se vuelve en contra e incluso se burla de quien le llama la atención por su acción y le pide que enmiende los efectos de sus actos. No sólo no intenta corregirlo, sino que además ni siquiera siente vergüenza y se mofa de quien le reprende, que, para mayor inri, suele sufrir también inocentemente las consecuencias.

Y por último, el grado sumo de irresponsabilidad consiste, bajo mi criterio, en que aquél del caso anterior (en que los efectos de su irresponsabilidad, que ni siquiera reconoce y que se pitorrea de quien se lo recrimina, que sufre también sus efectos) además, sale bien parado de su acción. En suma, comete una irresponsabilidad, no la reconoce, se ríe de quien se lo reprende que lo está sufriendo y, encima, él sale de rositas.

¿Que no conoces alguien que pueda ser tan ruin? Pues recuerda los comentarios de todo el equipo de gobierno y candidatos en 2.004 del PSOE empezando por su cabeza visible, Sr. ZP, cuando desde muchos lados (también entonces desde la oposición, sobre todo con el Sr. Pizarro y su desmedido sentido común) le avisaban del desastre económico que se avecinaba debido a su política de bolsillos rotos. Ellos han quedado o quedarán bien "colocados"; sin embargo, la población está pagando y pagará durante años las consecuencias de sus actos primero y de sus inacciones después.


 Y recuerda el grupo de corifeos que tenía, con desvergüenzas como este vídeo:

 



El irresponsable actúa, pagamos los efectos y, si nos quejamos, somos "unos cenizos", como decía aquél que lo mismo le cantaba a su abuelo Vítor que al General Franco y que, siempre estará alegre y defenderá su alegría de un riñón bien forrado de subvenciones. 

Y para terminar, me gustaría recordar aquello que, como el algodón que no engaña, nos puede hacer saber quién actúa más o menos responsablemente, y que nos decía un tal Jesús de Nazaret: "Por sus frutos los conoceréis, pues no se recogen uvas de los espinos ni higos de los cardos" (Mt. 7, 16) Claro que entonces siempre habrá un grupo de "amantes del avestruz" que quitará hierro al asunto con cosas como ésta:



No hay comentarios:

Publicar un comentario